Es uno de los mayores raptos masivos producidos en Nigeria en los últimos años, lo que provocó gran alarma nacional y reacciones alrededor del mundo.
Más de 300 estudiantes y docentes fueron secuestrados por hombres armados en una escuela en Nigeria, uno de los golpes de este tipo más grandes realizados en el estado de Nigeria recientemente, lo que generó un estado de alarma en el país y reacciones fuera de sus fronteras.
En cuanto a las víctimas de esta atroz práctica a manos de grupos yihadistas en varios países africanos, la Asociación Cristiana de Nigeria (CAN) detalló que fueron raptados 303 estudiantes y 12 docentes de la escuela St. Mary’s.
El ataque ocurre en medio de una ola de inseguridad que vuelve a golpear al sistema educativo nigeriano, amenazado por el presidente estadounidense, Donald Trump, con una intervención militar por una supuesta campaña de violencia yihadista contra los cristianos.
Apenas el lunes, 25 alumnas fueron secuestradas en una escuela de secundaria en el vecino estado de Kebbi, mientras que un ataque contra una iglesia esta misma semana elevó aún más la preocupación entre comunidades cristianas del país.
El gobierno nigeriano aún no confirmó el número total de víctimas. Según el gobernador del estado de Níger, Umar Bago, el departamento de inteligencia y la policía están «haciendo el recuento» y la cifra se publicará este sábado.
Las autoridades de los estados de Níger, Katsina y Plateau dispusieron cerrar todas las escuelas como medida de precaución. El ministerio de Educación del país ordenó también el cierre de 47 internados de secundaria en todo el territorio. El presidente Bola Tinubu canceló sus compromisos internacionales, incluida su participación en la cumbre del G20 en Sudáfrica, para gestionar la crisis.
Fuente: El Liberal

























