El renacer del CAP Yuquerí: Un viaje a través de la historia saladeril de Concordia
Desde 1880 hasta la Primera Guerra Mundial, la Industria Saladeril experimentó un gran auge en Concordia. Con saladeros como El Naranjal, Fleitas y Chico, que contribuían al panorama industrial a finales del siglo XIX.
Ya hacia 1927, un grupo de «visionarios vecinos» se unieron para ampliar la idea del Saladero a gran escala. Fleitas y Nebel, dueños de saladeros a orillas del río Uruguay, junto a otros como Benito Legerén, Domingo Yotilar, Orlando Oerteli, Lujan Larocca, Bertoni, Ferrari y otros formaron una Sociedad Anónima denominada Compañía Saladeril y Frigorífica S.A.
El establecimiento funcionó de forma provisoria en el Saladero Grande cuya propiedad fue alquilada a tal fin. Al poco tiempo se adquirió un terreno localizado al sur de la ciudad entre los arroyos Yuquerí Grande y Yuquerí Chico para la construcción de la planta fabril.
La fábrica se construyó teniendo como base la carne salada, envasada (corned beef), y derivados como: picadillo, paté, conservas, abonos químicos además de la faena de vacunos para la exportación, molienda de huesos, fabricación de aceites, grasas, pinceles para pintar, cueros, entre otros. La construcción del frigorífico llevó dos años hasta ser inaugurado en 1929, con la faena de vacunos, convirtiéndose en un actor clave en la escena nacional.
CAP Yuquerí, un Gigante en la Industria
Bajo la dirección de Benito Legeren, la Compañía Saladeril y Frigorífica S.A. se consolidó como un éxito, regulando precios y faenando 1,200 animales diarios. En 1941, la Corporación Argentina de Productores (CAP) adquirió la fábrica, que pasó a llamarse CAP Yuquerí, y comenzó a exportar carne congelada, enfriada y demás derivados sumado a los otros productos.
El frigorífico faenaba 900 vacunos y 500 ovinos diarios, realizaba todo tipo de cortes aprovechando todo lo que el animal brindaba. Cabe destacar que la existencia de un muelle facilitaba el transporte para la colocación en los mercados extranjeros.
En su apogeo (1945-1960), tuvo 3.000 empleados, que llegaban desde la ciudad en colectivo, bicicleta o el tren obrero; lo que contribuyó al posicionamiento de Entre Ríos en el panorama nacional.
Sin embargo, la década del 80 marcó su declive, los distintos cambios políticos y económicos fueron determinando su decadencia y posterior cierre el 31 de Agosto de 1980, en plena dictadura militar; dicho cierre fue justificado como parte de la política de favorecer a grandes empresas, quedando así el frigorífico por varios años abandonado y siendo conocido como el ex CAP Yuquerí.
La Resurrección del CAP Yuquerí
En 2020, la Municipalidad habilitó el funcionamiento del ex frigorífico. La Compañía Central Pampeana S.A. adquirió la planta y realizó significativas obras de remodelación. En 2021, ya con un aproximado de 25 personas empleadas en el frigorífico realizaron pruebas de funcionamiento de máquinas del ciclo de cuarteo y despostada y pidieron levantar las restricciones para importar y exportar, luego de asegurar tener iniciadas conversaciones con Uruguay, Brasil y China como destinos exportadores ni bien se tuviese la planta habilitada.
A fines de 2021 empezaron a comercializarse los primeros cortes faenados en el ex Frigorífico CAP Yuquerí pudiéndose adquirir en el mercado una variedad importante de cortes faenados y envasados en la planta de la fábrica, tales como colita de cuadril, peceto, arañita y entraña; los cuales se afirmó tienen garantizado la buena calidad, ya que los productos son envasados al vacío. Lo faenan, lo trozan en el frigorífico y lo envasan con temperaturas controladas y todas las medidas de calidad.
Este año, en 2023, la empresa comprometió más inversiones, incluyendo la construcción de un túnel de frío para ampliar un 40% la capacidad del establecimiento. Luego de aproximadamente cuatro años, la compañía adquirió el proyecto y, después de dos años, logró ponerlo en funcionamiento. Actualmente, opera en el «Ciclo 2», empacando al vacío y distribuyendo carne a puntos de venta en Concordia y Buenos Aires.
El frigorífico brinda empleo directo a 50 personas, contribuyendo al desarrollo local. Su enfoque principal es impulsar el mercado interno, abasteciendo a comercios locales y restaurantes. Además, aún están trabajando para obtener la habilitación que les permita exportar a mercados internacionales.
A pesar de la baja producción actual, la empresa proyecta expandirse. Recientemente obtuvieron la habilitación de la Unión Europea, pero enfrentaron desafíos con el cierre de las exportaciones. A pesar de esto, el frigorífico sigue operando, esperando un futuro próspero en la industria cárnica nacional e internacional. Con planes de generar hasta 400 puestos de trabajo, el CAP Yuquerí en el presente se erige nuevamente como un ícono en la historia industrial de Concordia.
La comercialización de los primeros cortes faenados en Concordia resalta la importancia del CAP Yuquerí como emblema histórico que, fusionado con la modernidad, proyecta un futuro próspero para la región.
El resurgimiento del CAP Yuquerí no solo representa la restauración de un ícono histórico en Concordia, sino también un testimonio vibrante de resiliencia y adaptabilidad en la industria cárnica. Desde sus inicios durante el auge de la Industria Saladeril hasta convertirse en un gigante bajo la denominación CAP Yuquerí, este frigorífico ha sido testigo de las transformaciones económicas y políticas a lo largo de los años.
El CAP Yuquerí, que alguna vez marcó el esplendor industrial de Concordia, ahora se presenta como un puente entre el pasado y el futuro, una historia que se teje con cada corte de carne, con cada empleo generado y con cada desafío superado.
Te invitamos a mirar el video completo en nuestro canal de YouTube: Diario Despertar Entrerriano, y conocer más acerca de la historia del CAP Yuquerí.
