Despertar Entrerriano

Diario de Concordia

El Club Progreso ha sido el epicentro de la vida social y cultural de Concordia, desde su fundación hasta la actualidad

El Club ha sido testigo y protagonista de innumerables momentos que han marcado la evolución de la comunidad concordiense, surgiendo en la nueva etapa de la vida social de Concordia, hasta su culminación al transformarse en el “Club Progreso” como tal.

En el año 1872 donde se inicia la nueva etapa para la sociedad de Concordia, luego del movimiento que culminó con los asesinatos de Urquiza y sus hijos, un profundo decaimiento social se abatió sobre nuestra ciudad. Se suspendieron todas las actividades de carácter social, pues existían bandas de delincuentes que asolaban la ciudad. Las tertulias que se podían realizar eran de carácter íntimo y en casas de familia, sobre todo cumpleaños y casamientos.

Todo esto ocurrió antes de la fundación del “Casino Progreso” conocido como el “Casino Comercial”. No se conoce la fecha de dicha fundación, pero se estima que fue en septiembre de 1872. En sus inicios contaba con pocos socios, pues todavía había temor en la gente por los acontecimientos políticos que reinaban en ese momento, pero poco a poco las fiestas fueron adquiriendo mayor esplendor luego del homenaje al Gobernador de la Provincia Dr. Leónidas Echagüe en el año 1872 y 1874.

Pero el esplendor del «Casino Progreso» también estuvo marcado por rivalidades y divisiones en la sociedad concordiense, reflejando las tensiones políticas y sociales del momento, en este sentido hay que hacer notar que en 1872 la sociedad concordiense sufría lo mismo que acontecía en el país; la división de dos grupos: los “Gallegos” y los “Criollos”.

El “Casino Progreso” era un centro hermético, donde sólo tenían ingreso las personas de dinero y de apellidos prestigiosos, ante esta situación, “Los Criollos” fundaron el “Liceo Recreativo” como alternativa, donde instalaron una biblioteca.

Las familias que concurrían al “Casino” jamás pusieron un pié en el “Liceo”, ya que las diferencias estaban bien marcadas: el Casino se dedicaba a las reuniones sociales, y el Liceo se dedicaba a tertulias, lecturas públicas, conferencias literarias y la utilización de la biblioteca que era la única que existía en la ciudad, donde se volcaban numerosos lectores.

Esta dualidad perduró hasta que los hombres más serenos de ambas instituciones, decidieron poner fin a esta situación, y propusieron fusionarse. De esta forma surgió la sociedad “Unión”, el 7 de noviembre de 1876, pero esto no pudo sostenerse en el tiempo por diferentes factores. Las últimas fiestas en la sociedad “Unión” fueron organizadas por las sociedades carnavalescas “El Cloroformo” y “La Marina” celebrando el Carnaval. La sociedad Unión se sostuvo hasta 1880 y como consecuencia de su cierre terminó la vida social de Concordia.

Luego de esto transcurrieron dos años para que se creara el “Casino Comercial”. Las primeras autoridades del mismo fueron las siguientes: Presidente Dr. Felipe Heras, Vicepresidente Luis Burone, Secretario Luis R. Costa, Vicesecretario Mateo Iglesias, Tesorero Indalecio Menchaca, Vicetesorero Antonio Martín y Vocal Gaspar Aromí. El abono mensual era de setenta y cinco pesos fuertes, y en sus inicios contó con 65 socios; posteriormente en su primer año llegó a los 107 socios; más tarde por 1896 ya tenía 224 socios, aunque en 1907 su cifra bajó a 205 socios, al disolverse en 1910 contó con 216 socios.

El Casino Comercial ocupó varios locales a través de los años. También se ubicó en calles Urquiza y Mitre (dicho local era considerado como una “Tapera”), donde posteriormente en 1935 estuvo el “Bar Unión”. En 1885 se encontraba en calles Pellegrini y 1º de Mayo, edificio que fue construido por Federico Zorraquín (luego pasó a ser el Hotel Colón). El Casino arrendó la parte alta, y en la planta baja se instaló un café y billares cuya propiedad era de Juan Chaumineally; luego estuvo Santiago de Donatis y en 1887 Francisco Luchetti. Tiempo más tarde pasó a un local de calle 1º de Mayo 67/71. En 1898 se mudó a calles 1º de Mayo y La Rioja, propiedad del Sr. Taccioli, donde también funcionó el Banco de Londres. En 1902 estaba en calles 1º de Mayo y Urquiza (más tarde fue Casa Amiano y luego Bar Ideal hasta el día de hoy). Por último, ocho años después se trasladó a calles Mitre y Pellegrini, cuya construcción estuvo a cargo de Isthilart, Robinson, Mendiburu y Legerén (donde luego fue el Centro Empleados de Comercio; hoy en día es el Centro Cívico). Allí estuvo desde 1910 cuando el Casino Comercial se transformó en “Club Progreso”

El Club Progreso tomó forma definitiva el 12 de marzo de 1910, continuando los estatutos del antiguo «Casino Comercial». El Club se consolidó como un pilar de la vida social de Concordia; Al terminar el período de 1908-1909 la Comisión Directiva del Casino era presidida por el Dr. Manuel del Cerro Requena, quién propuso reemplazar el nombre de la institución, y fue allí que se estableció con el nombre de “Club Progreso”.

Al realizarse la transformación, los socios que pasaron fueron los 216 que tenía el Casino Comercial, el Capital era de 9.291 en muebles y 3.690 en efectivo. La mudanza hacia un nuevo terreno comenzó en abril de 1910 y culminó el 10 de mayo. La tarea fue ardua y al finalizar el período, el capital ascendía a 38.000 pesos, no tenían deudas, y contaban ya con 241 asociados.

Fue así que a lo largo de los años, el Club Progreso experimentó múltiples transformaciones, desde cambios de sede hasta la expansión de sus actividades recreativas y culturales. Si bien las conversaciones para adquirir un edificio propio datan de 1895 cuando todavía era Casino Comercial, recién en 1921 se consiguió llevar adelante este anhelo, creándose un “Fondo Pro Edificio Social”. La presidencia era de Pedro Sauré y lo secundaban Martín Prete, Luis Fonseca, Miguel Serrichio, Agustín Scharn, Agustín Más, Enrique Troncoso, Aquiles S. Lorenzo y José Ravasio, hasta que en una Asamblea del 10 de septiembre de 1928, decidieron aprobar la adquisición del terreno y casa del propietario Juan P. Garat; pero fue recién en noviembre de 1933 que se aprobó la firma del contrato de la compra de dicha propiedad, que estaba ubicada en calle Pellegrini entre Corrientes y Salta.

Este nuevo edificio no solo brindó un hogar permanente al Club, sino que también amplió sus horizontes, ofreciendo instalaciones para una variedad de actividades que abarcaban desde: Pileta de natación, cancha de pelota a paleta, espacios para esgrima, amplio gimnasio y sauna. También otras actividades como reuniones y cenas del Club de Leones, Rotary Club; desfiles de modelos; recepciones de colegios secundarios; salones para juegos lúdicos; conferencias; salón de lectura; comedor, etc. Y amplios jardines ornamentados con esculturas y pérgolas y abundante vegetación.

Hoy en día, el Club Progreso se ha convertido y sigue siendo un referente para la comunidad concordiense, un lugar donde convergen la historia, la cultura y el espíritu de aquel primer  “Casino Progreso” o “Casino Comercial”. Con sus jardines ornamentados y sus espacios multifacéticos, continúa siendo un símbolo de la vitalidad y la unidad de Concordia, honrando su legado mientras mira hacia el futuro con esperanza y determinación.

Te invitamos a mirar el video completo de ¿Sabías que…? ya disponible en nuestro canal de YouTube: Diario Despertar Entrerriano, y conocer las curiosidades acerca del actual “Club Progreso» de nuestra ciudad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

YouTube
YouTube
Instagram
WhatsApp