Marcos Embon: «Viajaron para poder vivir un poco mejor y ahora están todos preocupados»
La reciente escalada de violencia en Medio Oriente ha generado preocupación en la comunidad judía de Entre Ríos, incluyendo Concordia. En respuesta a esta preocupación, la seguridad se ha fortalecido en lugares simbólicos para la comunidad en toda la provincia. Marcos Embon, presidente de la Asociación Unión Israelita de Concordia habló con nuestro medio Diario Despertar Entrerriano, confirmó estas medidas y compartió información importante sobre la situación actual.
Embon informó que más de 100 familias concordienses se encontraban en Israel cuando estalló el conflicto. Además, muchos hijos de concordienses que estaban estudiando en la región pudieron regresar.
En este sentido, dijo que «es algo inconcebible en todo sentido, llevó a algo que no se puede creer. Es una zona donde relativamente se vivía en paz. Es triste el salvajismo que hubo, estamos simplemente trabajando con la gente que tiene familias en Israel, ayudando en lo que se puede, tratando de traer estudiantes, turistas y familias concordienses», puntualizó.
Sobre esto, reconoció que «se reforzó la seguridad en las distintas asociaciones, simplemente me parece que la ciudadanía argentina no merece otro atentado más después de lo que fue AMIA, no corresponde. Somos todos ciudadanos argentinos y velamos para poder vivir en paz».
«Hay muchos padres concordienses que tienen hijos allá, muchas familias, adultos, que han ido por necesidad de no poder sostenerse económicamente en Argentina. Son muchos conocidos, apellidos conocidos, profesores de educación física, profesionales que se fueron. Viajaron para poder vivir un poco mejor y ahora están todos preocupados», pudo detallar Embon a nuestro medio.
Asimismo, comentó que «concordienses, son más de 100 familias. Se volvieron muchas familias, estudiantes y turistas, ya están casi todos de regreso. El Servicio Militar en Israel es obligatorio, muchos chicos fueron. El ejército les ofrece una beca para una carrera porque allá es muy caro, no es como en Argentina. Hacen un servicio militar dos años, le becan una carrera después», cerró.
